La Fórmula 1 volverá al Autódromo de los Hermanos Rodríguez en menos de 2 meses, entre el 5 y 7 de noviembre, una semana después de las festividades del Día de los Muertos en México, y será uno de los eventos más esperados del calendario 2021 en el país.
Después de un año de ausencia, el Gran Premio de México se celebrará a lo grande, y se espera que el recinto de capacidad para 110 mil personas pueda acoger al menos un 75% de público.
Numerosos eventos paralelos se están preparando para el fin de semana y, en particular, la escudería de Red Bull ofrecerá un show case en el Monumento a la Revolución en donde los fans de la F1 podrán sentir de cerca el rugido del monoplaza mientras circula por el centro.
Y es que Red Bull es la flamante escudería del mexicano Sergio “Checo” Pérez, por lo que la empresa con sede en Austria pretende deleitar al público compatriota de su piloto para que la relación de afecto crezca aún más.
La temporada de Checo está siendo a la altura de los más grandes pilotos del circuito. Hasta el momento consiguió un primer lugar en Azerbaiyán y un tercer lugar en Francia, y marcha en quinto lugar de la clasificación general en la Fórmula 1.
A raíz de las buenas prestaciones del mexicano en el monoplaza, fue renovado para la temporada siguiente. Pero el nuevo contrato también se acompaña de una renovación en los objetivos de poder ganar más títulos en un coche de carreras que permite a Checo poder competir al más alto nivel. Y el GP de México es sin duda uno de los mayores sueños para el segundo piloto en jerarquía del equipo.
Checo tiene una debilidad por ciertas carreras. El GP de Barcelona es un favorito entre pilotos, y es que la Ciudad Condal alberga algunos de los mejores torneos en varias disciplinas deportivas, como el EPT (European Poker Tour) o el IRONMAN 70.3. En el caso de Checo, él tiene una debilidad por este torneo porque fue ahí donde consiguió sus primeros puntos.
Lo mismo para Mónaco, con la oferta de lujo entre los que destacan el casino de Montecarlo, pero que para Checo es un circuito en donde vivió altos y bajos que lo hicieron crecer como piloto.
Y en el caso del GP de México, no hace falta explicar las razones detrás de la motivación de Pérez para conseguir pararse en lo más alto del podio.
El historial de Pérez corriendo en México no es halagador. En 5 carreras, la posición más alta que consiguió fue el séptimo lugar, en dos ocasiones, en 2019 y 2017. Pero siempre estuvo entre los diez primeros, habiendo terminado noveno en 2015 y décimo en 2016, años en los que no competía por nada en la escuadra de Force India.
Esa es justamente la diferencia con entregas pasadas, y es que ahora llega con un coche que le permitirá intentar buscar la victoria. Otro factor importante será el del público, que vibrará en unísono a favor del mexicano y el apoyo que se espera durante todo el fin de semana puede ser muy importante para la motivación del piloto mexicano.
La ilusión de Checo Pérez ya se hace escuchar desde hace semanas, en numerosas intervenciones con la prensa en la que reconoció estar pensando en el GP de México: “Con muchas ganas de estar con la afición. Seguramente ahora con una oportunidad de ganar, va a ser un fin de semana muy especial” comentó en la previa del GP de Italia en Monza hace un par de semanas.
Los directivos del equipo también tienen puesta su confianza en Pérez para el GP de México. El jefe del equipo, Christian Horner, ya anticipó que el equipo tiene marcada la fecha del 7 noviembre a fuego y espera que el mexicano pueda finalmente conseguir un podio: “Será brillante para Checo experimentar ese nivel de apoyo en casa y estoy seguro de que lo inspirará para producir algo especial”.
Sergio Pérez aún tendrá 3 Grandes Premios antes de la cita en México, aquellos de Rusia, Turquía y Estados Unidos, por lo que tendrá más tiempo para terminar de afinar las buenas sensaciones de cara a su vuelta a México.
