En un circuito de carreras de EE. UU. se han instalado 2.135 metros cuadrados de paneles Vision Ultra de digiLED.
Big Hoss TV del Texas Motor Speedway (TMS), que reemplazó una pantalla instalada en 2014, tiene 11 pisos de altura y comprende más de 8,2 millones de píxeles.
El área de visualización equivale a 4.331 televisores de 42”, lo que la convierte en una de las pantallas más grandes del mundo.
Un requisito clave para el proyecto era reutilizar la estructura de acero existente. Esto permitió reutilizar las fuentes de alimentación originales y redujo el impacto ambiental del monitor, eliminando la necesidad de que TMS comprara alrededor de 15 toneladas de acero.
El sistema fue construido, probado y enviado en 60 días, una hazaña que fue posible gracias a la reutilización de la estructura de acero, pero digiLED aun así lo sometió a pruebas intensas, incluidas pruebas de “tortura” a más de 160 °F durante tres horas seguidas.
El diseño exclusivo de la carcasa del Vision Ultra también ayudó al integrador GoVision a instalar el monitor en cinco semanas.
En un lugar caluroso y a menudo seco, los ventiladores y los filtros eran un problema para el Big Hoss TV original. Los paneles Vision Ultra utilizan refrigeración pasiva en lugar de ventiladores, mientras que un soporte de aluminio proporciona una gestión térmica mejorada. Estas características hacen que las pantallas requieran menos mantenimiento y sean reciclables al final de su vida útil.
Los paneles ofrecen 10.000 nits de brillo, lo que garantiza que sean visibles incluso bajo la luz solar directa.
La pantalla se instaló a tiempo para sorprender a los fanáticos en la primera carrera de la temporada, el fin de semana de playoffs de NASCAR Autotrader EchoPark Automotive 400, mostrando aspectos destacados, estadísticas y contenido publicitario.
