Concurso busca llenar México de cunas ante intento de prohibirlas
Con un belén, pesebre o belén, dijo, “estamos hablando del anuncio de una verdad histórica, que es que Dios se encarnó, se hizo hombre y se hizo presente entre nosotros para salvarnos. 🇧🇷
Para el belén, que significa paz, perdón, armonía y salvación, “no hay prohibición”, dijo Patrito, porque “todo lo que significa el belén promueve el bien de la sociedad; no se puede limitar”.
Primero belenes, luego Nuestra Señora de Guadalupe
El sacerdote advirtió que si el Tribunal Supremo decide prohibir los belenes, “después serán los árboles de Navidad. Y luego habrá peregrinaciones, porque son una manifestación de la fe pública”.
“O quitarán las imágenes de Nuestra Señora de Guadalupe de los mercados, porque los mercados son espacios públicos”, dijo.
“Y esto ya está ocurriendo en otros lugares: recordemos cómo en España el Estado está sacando crucifijos de los bienes públicos bajo los mismos principios que ahora se utilizan en la impugnación judicial”, dijo.
“¿Queremos obtener el mismo resultado en México? ¿Queremos una cultura desacralizadora con una religión estatal atea y laica?”. preguntó el sacerdote.
Para Patrito, la posible prohibición de los símbolos religiosos en los bienes públicos “es un problema que afecta al ejercicio de la libertad religiosa y, más concretamente, es la cuestión de dónde está Cristo en la plaza pública”.
“Por eso es tan importante no callarse”, subrayó.
Esta historia fue publicada por primera vez por ACI Prensa, el socio de noticias en español de CNA. Fue traducido y adaptado por CNA.