CIUDAD DE MÉXICO (AP) — El huracán Roslyn azotó el domingo por la mañana un tramo escasamente poblado de la costa del Pacífico de México entre los centros turísticos de Puerto Vallarta y Mazatlán, luego cedió a fuerza de tormenta tropical y avanzó rápidamente hacia el interior.
El domingo por la noche, Roslyn tenía vientos de 35 mph (55 km/h), por debajo de su pico de 130 mph. El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos dijo que Roslyn se encontraba a unos 95 kilómetros al este-sureste de la ciudad norteña de Torreón.
El huracán se movía hacia el noreste a 21 millas por hora (33 km/h) y se esperaba que perdiera aún más fuerza a medida que avanza tierra adentro. El centro espera que Roslyn se disipe antes de llegar a Texas.
Medios locales informaron que dos personas murieron luego de refugiarse en estructuras inestables que se derrumbaron durante la tormenta, pero la protección civil del estado de Nayarit dijo que no podía confirmar estas muertes.
Aunque falló un golpe directo, Roslyn trajo fuertes lluvias y olas altas a Puerto Vallarta, donde las olas del mar azotaban el malecón frente a la playa.
Roslyn tocó tierra en el estado de Nayarit, aproximadamente en la misma zona donde el huracán Orlene tocó tierra el 3 de octubre.
El huracán golpeó el pueblo de Santa Cruz, cerca del pueblo pesquero de San Blas, a unos 150 kilómetros al norte de Puerto Vallarta.
José Antonio Barajas, alcalde de San Blas, dijo en un video difundido que algunas casas sufrieron daños y se cortó el suministro eléctrico, pero nadie murió ni resultó gravemente herido.
“Los vientos de este huracán fueron realmente tremendos”, dijo Barajas. “El sonido del viento era fuerte”.
En Tepic, capital del estado de Nayarit, Roslyn derribó árboles e inundó algunas calles; Las autoridades instaron a los residentes a abstenerse de salir el domingo mientras los equipos trabajaban para despejar un deslizamiento de tierra que había bloqueado una carretera local.
La Comisión Federal de Electricidad informó que más de 150,000 hogares quedaron sin energía eléctrica a causa de la tormenta y que para el mediodía del domingo se había restablecido el servicio a cerca de un tercio de esos clientes.
Mientras tanto, los restaurantes frente a la playa en Puerto Vallarta, donde los turistas almorzaron sin preocupaciones el sábado, fueron abandonados el domingo por la mañana, y en algunos las olas arrastraron barandas y pequeñas estructuras con techo de paja que normalmente protegen a los comensales del sol.
El jefe de la oficina estatal de protección civil para el área de Puerto Vallarta, Adrián Bobadilla, dijo que las autoridades están patrullando el área pero aún no han visto daños importantes.
“El mayor efecto fue por el oleaje, en alguna infraestructura junto al mar”, dijo Bobadilla. “No tuvimos ningún daño significativo”.
La defensa civil del estado publicó un video de oficiales escoltando a una gran tortuga marina de vuelta al agua después de que enormes olas la arrojaran a la playa.
La Comisión Nacional del Agua dijo que las lluvias de Roslyn podrían causar deslizamientos de tierra e inundaciones, y el Centro de Huracanes de EE. UU. advirtió que las fuertes lluvias podrían causar inundaciones y deslizamientos de tierra en terrenos accidentados del interior.
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