Reseña: Marino Tirimo y Atsuko Kawakami, Chichester Music Society
La Sociedad de Música de Chichester dio la bienvenida a Marino Tirimo y Atsuko Kawakami a su concierto del 10 de noviembre en la Universidad de Chichester. Los dos pianistas fueron los últimos arrestados hace un año y tocaron en una sala vacía a excepción de un presidente solitario. Esta vez, había una audiencia expectante, muchos de los cuales habían escuchado su último show en línea y ahora esperaban con ansias una noche especial de duetos de piano en vivo. No deberían decepcionarse.
La primera pieza fue la Fantasía a 4 manos en fa menor Opus D940 de Schubert. Esta pieza fue escrita para la sala de estar, no para la sala de conciertos, pero las interpretaciones y actuaciones de los músicos dieron vida a la pieza en la Capilla de la Universidad.
Para este concierto, el Steinway Fancy D del siglo XIX, que fue resucitado y reparado por la Universidad, fue afinado especialmente para esta ocasión, ya que es un instrumento muy adecuado para esta pieza introductoria. Ambos músicos tocaron juntos para Schubert, pero después de eso estuvieron en pianos de cola separados.
La segunda pieza fue Variaciones sobre un tema de Haydn Opus 56b [St Anthony Chorale] por Brahmas. El Dúo impulsó cada variación, adaptándose a los temas de cada sección, con sensibilidad y virtuosismo. La séptima variación, en estilo lírico, fue un éxito particular, cantando con colorida musicalidad.
Tras la pausa, el programa se trasladó a Argentina y la música de Carlos Guastavino. Este compositor, aunque muy conocido en su propio país, rara vez se toca aquí, pero esta fue una exploración bien elegida de la música sudamericana del siglo XX. El dúo tocó tres pequeñas melodías de ritmos diferentes, que se inspiraron en la guitarra y el estilo local de ritmos de baile, y los pianistas interpretaron la música de manera muy efectiva para que te sientas completamente transportado a través del Atlántico hacia Sudamérica.
La pieza final fue Rapsodie Espagnole de Ravel. Esta es una pieza desafiante, y Duo realizó una actuación que, enfatizando la influencia española, estuvo llena de textura y energía. El final fue un tour de force y fue tan bien recibido por el público que dio lugar a dos bises de El cascanueces de Tchaikovsky.