Perro náufrago australiano cobra nueva vida con ‘segundo papá’ en México
Bella terminó varada con Shaddock en un catamarán golpeado por una tormenta en el Océano Pacífico durante semanas, hasta que fueron rescatados el fin de semana pasado por un barco atunero que pasaba y llegaron a la costa de México.
Shaddock, de 54 años, decidió no llevar a Bella de regreso a su casa en Australia, preocupado de que el largo viaje fuera demasiado estresante además de la reciente prueba de Bella.
Pero la historia tiene un próximo capítulo feliz.
Bella fue adoptada por Genaro Rosales, de 48 años, tripulante del barco atunero que la trajo a la playa y autoproclamado «amante de los perros y de todos los animales».
«Fui uno de los primeros en tener contacto con ella», dijo Rosales a la AFP en el puerto occidental de Manzanillo, donde llegaron el martes Shaddock y Bella.
“Fui yo quien la abrazó, para subirla a una de las (dos) lanchas” en las que él y tres acompañantes se acercaron al catamarán averiado.
«Ella estaba feliz cuando nos vio».
Shaddock, de 54 años, y Bella partieron de La Paz, México, en abril y planeaban navegar unos 6.000 kilómetros (3.700 millas) antes de echar el ancla en la Polinesia Francesa.
Pronto se encontraron atrapados después de que el mar embravecido dañara el barco y dejara sin componentes electrónicos.
En un rescate que recuerda a la película de Tom Hanks «Náufrago», el marinero aficionado y su perro fueron sacados del agua «a más de 1.200 millas de tierra», según la empresa pesquera Grupomar, propietaria del atún.
Después de llegar a tierra firme, Shaddock dijo que Bella «es mucho más valiente que yo».
Sobre su origen, dijo a los periodistas que el perro «me encontró en medio de México» y luego se quedó a su lado.
«Ella no me dejaba ir. Traté de encontrarle un hogar unas tres veces y ella siguió siguiéndome hasta el agua».
«Ella es un animal hermoso. Estoy agradecido de que esté viva».
‘Un poco estresado’
El día del rescate, Rosales se encargó de calmar a Bella y darle el tratamiento inicial.
“Timothy vio el trato que le di a Bella, la atención que le di”, dijo Rosales a la AFP.
“Le dije que me gustaban los animales, tengo perro, tengo gatos, ¡he tenido de todo! Y bueno, decidió que yo sería el segundo padre (de Bella)”, sonrió el pescador.
Rosales describió a Bella -una mestiza de pelaje oscuro y manchas doradas- como «muy dócil».
Físicamente estaba bien, dijo, pero según un veterinario que la examinó, «un poco estresada por su tiempo en el mar».
Una vez que lleguen a su hogar en el pueblo costero de Mazatlán, conocerá a «su nuevo hermano» Vicente, un pug que Rosales dijo que es «muy mimado».
«Mis mascotas duermen en mi cama, les enciendo el aire acondicionado. Tienen todos los privilegios», dijo.
El viernes, que es el Día Mundial del Perro en México y algunos otros países, Rosales hizo un llamado a tratar con cuidado a nuestros amigos peludos.
“Cualquier tipo de animal que tengas en casa es un miembro de tu familia”, dijo. «Tienes que… tratarlos bien».