Nuevo museo en México destaca salamandra ajolote en peligro de extinción
CIUDAD DE MÉXICO: Un nuevo museo y centro de conservación dedicado a la salamandra ajolote de México, en peligro crítico de extinción, destaca la notable historia de este anfibio que ha captado la atención de los científicos y del público por igual.
Con una impresionante capacidad de autocuración, las salamandras axolotl (pronunciado ah-sho-LO-tul) se exhibieron en la exhibición, que se inauguró el sábado en el Zoológico de Chapultepec en la Ciudad de México.
El centro tiene como objetivo crear conciencia sobre el animal, que es nativo solo de México y que está disminuyendo en la naturaleza debido a las graves amenazas a su hábitat natural.
Durante décadas, los investigadores se han maravillado de cómo el ajolote puede regenerar las extremidades amputadas y el tejido corporal dañado, incluso el corazón y el cerebro. Los científicos también han documentado su capacidad para respirar con pulmones y branquias, así como para absorber oxígeno a través de su piel, lo que lo hace particularmente vulnerable al agua contaminada.
“Son uno de los pocos animales que pueden regenerar su piel, músculos, huesos, vasos sanguíneos, nervios, corazón, cerebro”, dijo Fernando Gual, jefe de conservación de vida silvestre en el zoológico.
«Una parte sumamente importante de este espacio es la educación ambiental», dijo Gual sobre las exhibiciones, talleres y laboratorios del nuevo museo.
En la leyenda azteca, el desesperado dios rebelde Xólotl se transformó en un ajolote para esconderse y evitar ser sacrificado por sus compañeros dioses. Todavía fue descubierto, capturado y asesinado. También fueron un pilar en las mesas de los banquetes de los reyes aztecas.
Si bien el ajolote nativo del distrito de Xochimilco, en el sur de la Ciudad de México, es especialmente conocido, Gual señala otros 16 tipos de ajolotes que también llaman hogar a México, cada uno «como embajador de los humedales».
Los ajolotes una vez prosperaron en los canales fangosos de Xochimilco, la única parte que queda de un extenso sistema de vías fluviales que se asemeja a Venecia y que se remonta a la época de los aztecas. Pero la expansión urbana, el agua contaminada y los peces no nativos con gusto por los ajolotes jóvenes han llevado al colapso casi total de la salamandra, según encuestas de población.
Aun así, Xochimilco aún posee casi el 11 por ciento de la biodiversidad de México, según Gual, con las 370 especies de anfibios del país ocupando el quinto lugar en el mundo.
Cuando el museo abrió para sus primeros visitantes, el estatus de celebridad del ajolote era fácil de detectar.
“La verdad es que estoy muy, muy, muy emocionado de poder ver cómo comen, cómo viven, cómo son”, dijo el visitante Fernando, que no quiso dar su apellido pero mostró un pequeño tatuaje de ajolote en su brazo. .
«Estoy marcado de por vida».