México: monitoreo de protección, reporte trimestral (octubre, noviembre y diciembre 2021) – México
RESUMEN Y PRINCIPALES CONCLUSIONES
Este informe presenta los resultados del Monitoreo de Protección realizado en forma conjunta por el RDC y el JRS en Ciudad Juárez y Tapachula, México, entre octubre y diciembre de 2021. Durante el trimestre, se utilizó una herramienta estandarizada de Monitoreo de Protección para recopilar datos cuantitativos sobre riesgos de protección y necesidades humanitarias en 438 hogares que comprenden un total de 1.088 personas. Se recolectaron datos cualitativos complementarios a través de discusiones de grupos focales, entrevistas con informantes clave, observaciones directas y fuentes secundarias. Si bien este informe destaca las tendencias relevantes detectadas durante el trimestre, también hace referencia a algunos patrones globales desde octubre de 2020, cuando comenzaron las actividades de monitoreo de protección en México.
Los hallazgos clave para el período de octubre a diciembre de 2021 incluyen:
Importantes flujos migratorios mixtos siguen llegando a México. Mientras que el 61.3% de los encuestados extranjeros expresa la intención de permanecer en México, los retrasos en los trámites que prolongan el acceso a la protección de refugiados y la regularización migratoria, la falta de coordinación entre la COMAR y el INM, lo que se traduce en restricciones a los derechos de los solicitantes de asilo y las malas condiciones de vida en Tapachula, contribuir a los movimientos colectivos (caravanas) desde el sur de México hacia otras partes del país.
La implementación de políticas que restringen el acceso a los procedimientos de asilo de EE. UU. continúa junto con la desinformación y los cruces fronterizos irregulares de EE. UU. y México. El 62,3% de los encuestados en este lugar confirmaron haber intentado ingresar a EE. UU., de los cuales el 72,1% fueron pasajes irregulares.
El 48.3% de la población monitoreada reporta tener necesidades específicas producto de diferentes situaciones de vulnerabilidad. En general, la capacidad de respuesta humanitaria es insuficiente para responder a las necesidades existentes y prevenir y mitigar los riesgos de protección. Aproximadamente un tercio de los monitoreados (33,6 %) informan que no tienen acceso a la asistencia humanitaria.
Las necesidades prioritarias siguen dependiendo de las condiciones locales. En Ciudad Juárez, los encuestados señalaron la salud como una prioridad abrumadora, seguida de los procedimientos de asilo y seguridad. En Tapachula, la documentación, la alimentación y los recursos monetarios son las prioridades predominantes.