Una nave espacial de la NASA que viajó al asteroide Bennu recolectó una muestra de unos 250 gramos para enviarla a la Tierra el próximo año, muy por encima de su objetivo mínimo de 60 gramos, según un estudio publicado este jueves por la revista Science de EE.UU.
La superficie del asteroide Bennu a una distancia de unos 40 metros en una fotografía de la nave espacial OSIRIS-REx de la NASA, con un brazo de muestra de roca que se ve extendiéndose desde el centro. (Foto cortesía de la NASA)(Kyodo)
La NASA planea entregar una parte de la muestra recolectada por su nave espacial OSIRIS-REx a la agencia espacial japonesa, que previamente compartió con la agencia estadounidense parte del material recuperado del asteroide Ryugu por su explorador Hayabusa2 que regresó a la Tierra en diciembre de 2020.
Se cree que los asteroides son restos de la formación temprana del sistema solar, hace unos 4600 millones de años. Estudiarlos debería proporcionar nuevos conocimientos sobre la formación del sistema solar y los orígenes de la vida.
La nave espacial OSIRIS-REx llevó a cabo la primera misión estadounidense para recolectar una muestra de un asteroide y devolverlo a la Tierra. Llegó sobre Bennu en diciembre de 2018 y realizó estudios antes de aterrizar en la superficie del asteroide para recolectar muestras de rocas en octubre de 2020.
La Administración Nacional de Aeronáutica y del Espacio tenía la intención de obtener una muestra de al menos 60 gramos, y se espera que el material recolectado sea entregado a la Tierra en septiembre del próximo año.
Hayabusa2, que es más pequeña que la nave espacial OSIRIS-REx, trajo alrededor de 5,4 gramos de material de Ryugu.
La muestra recolectada por Hayabusa2 contenía más de 20 tipos de aminoácidos, los cuales son esenciales para que todos los seres vivos produzcan proteínas. El descubrimiento apoyó la idea de que los orígenes de la vida en la Tierra procedían del espacio exterior.
