La crisis económica cerró 867 sucursales bancarias, redujo el uso de tarjetas de crédito
Los bancos, sintiendo el impacto de la crisis económica generada por la pandemia Covid-19, cerraron 867 sucursales en el primer trimestre del año y vieron la disolución de más de un millón de contratos de tarjetas de crédito, según la Comisión Nacional de Bancos y Valores ( CNBV).
Esto aumentó el riesgo de exclusión financiera con algunas comunidades que quedaron sin una agencia física, verificando el objetivo declarado de las instituciones financieras de llegar a todos los municipios del país para el 2024.
Sin embargo, el riesgo de exclusión financiera fue compensado por el aumento de la banca digital y la aversión a los pagos en efectivo, ambos efectos secundarios de la pandemia.
Los 50 bancos que operan en México cerraron el 6% de los puntos de contacto disponibles para los clientes y ahora ofrecen un total combinado de 11,912 ubicaciones, contra 12,779 en el primer trimestre de 2020.
Mientras tanto, el uso de tarjetas de crédito disminuye: siete bancos – BBVA México, Banorte, Citibanamex, Santander, HSBC, Scotiabank e Inbursa – poseen el 70% de todos los contratos de tarjetas de crédito y cerraron el primer trimestre con un total de 27,7 millones, en comparación con 28.72 en el mismo período el año pasado.
La tendencia a alejarse de las tarjetas de crédito se debe a la preferencia de los consumidores por realizar pagos con ingresos disponibles y por ahorrar más de lo que ganan, según la Asociación de Bancos Mexicanos (ABM).
Los pagos en efectivo son otra víctima de la pandemia. Los retiros en cajeros automáticos cayeron en más de dos millones en el primer trimestre, mientras que los pagos con tarjeta en terminales de punto de venta aumentaron en más de siete millones.
Las herramientas financieras digitales se han beneficiado de los cambios en los hábitos de los consumidores. Su mayor fortaleza se reflejó mejor en el aumento de las transacciones de telefonía celular durante los primeros tres meses del año, que totalizaron más de 52 millones, un aumento del 26,5% con respecto a 2020.
Fuente: Milenio (sp)