El dinero enviado a casa por mexicanos que trabajan en el extranjero aumentó 7.6% en 2023, alcanzando un récord de $63 mil millones
En 2022, las remesas crecieron un 13,4%, sumando alrededor de 58.900 millones de dólares en todo el año. En 2021, las remesas crecieron un sorprendente 27,1%, alcanzando un total de alrededor de 51.600 millones de dólares ese año.
Los observadores dijeron que el crecimiento más lento podría deberse a una combinación de factores como un crecimiento económico más lento en Estados Unidos -donde trabajan la mayoría de los inmigrantes mexicanos-, una inflación más alta y un peso mexicano más fuerte.
Las remesas ahora superan a casi todas las otras fuentes de ingresos extranjeros del país, incluido el turismo, las exportaciones de petróleo y la mayoría de las exportaciones de productos industriales.
México recibe más dinero por remesas que cualquier otro país excepto India. Los inmigrantes indios envían a casa alrededor de 125 mil millones de dólares al año. La proporción de remesas procedentes de China se ha visto afectada por la pandemia de coronavirus.
El valor promedio de cada transferencia se mantuvo estable en $393, solo un ligero aumento con respecto al promedio de 2022 de $391, pero el número total de transferencias aumentó 6.6% a más de 161,000, según el Banco de México.
Las remesas comenzaron a aumentar dramáticamente en mayo de 2020, justo cuando la pandemia comenzaba a afectar a México.
Las remesas como porcentaje del PIB de México casi se han duplicado en la última década, pasando del 2% del PIB en 2010 al 3,8% en 2020; desde entonces, esa cifra puede haber aumentado hasta alrededor del 4,5%. Entre 2010 y 2020, el porcentaje de familias en México que recibieron remesas aumentó del 3,6% al 5,1%.
